En esta ocasión, tenemos una colaboración especial para esta entrada del blog: Mi colega Enrique, un veterano de las Jornadas de Jovenes Investigadores que os contará el desarrollo de las jornadas de Barcelona, que se celebraron del 25 al 27 de Febrero:
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Las jornadas comenzaron, como todos los años, con la recogida de credenciales y merchandising variado (cuadernos, bolis, planos de la ciudad, y cómo no, material de las jornadas paralelas, en esta ocasión, una pieza de puzzle); todo ello amenizado por la muchachada anti-Bolonia que había ocupado el hall principal de la universidad, con sus diábolos y sus pancartas (ains, qué pena que los echaran hace poco, con la vidilla que le daban al edificio...).
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Continuaron, como todos los años, con el acto inaugural: Rectores, secretarios, presidentes de la Federación de Jovenes Investigadores y del comité organizador de las jornadas haciendose la pelota los unos a los otros, y, para terminar el día, charla del señor Labastida (secretario general del Ministerio de Ciencia e Innovación) para presentarnos públicamente la nueva Ley de la Ciencia, a la que acudió armado con escudos de diplomacia y de buenas palabras para enfrentarse a la sarta de críticas que le llovieron, debidas a las propuestas de cambiar el Estatuto de los Trabajadores, cuyo objetivo es que los investigadores puedan estár más del triple de tiempo contratados en prácticas de lo que están el resto de profesionales, así como que no se beneficien del las reformas para el fomento de empleo estable.
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Tras aguantar esta larga serie de rollos empezaron las jornadas paralelas: Las piezas que nos habían dado pertenecían a varios puzzles diferentes y durante la cena tenías que buscar a la gente que tenía las piezas que faltaban para completar tu puzzle.
Así que tras ir al cutre-albergue en el que estabamos alojados (con un estilo decadente a lo Blade Runner, que es lo que se lleva en Bélgica) para ducharnos en las cutreduchas de las macro habitaciones (la mía era para 5 personas y era de las pequeñas), nos dispusimos raudos y veloces a ir al Centre de Cultura Contemporània barcelonés, que más que un cutre-restaurante era una megaterraza que te cagas, a 5 min. de las ramblas, desde la que se veía toda la ciudad. Allí entre vinos y pintxos de gamba deconstruida fuimos haciendo el chorra debido a las pruebas que nos mandaban los de las jornadas paralelas y el vino que impedía que nos negáramos a hacer el ridículo. Después, tras un par de cervezas en un bareto irlandés, y una crisis de identidad sexual, durante la que me llamé Gloria durante un par de horas, nos fuimos a casa, que eran las 3 y las charlas del día siguiente empezaban a las 9.
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El jueves discurrió con una larga jornada de charlas sobre I+D en las PYMEs, las deficiencias del sistema científico español, etc, etc. Y por la tarde, un taller muy interesante y útil... para cuando tengamos 40 años y nos dediquemos a pedir, gestionar y liderar proyectos de investigación.
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A la noche, cena en el "World Trade Center" (toma ya!), en pleno puerto de Barcelona, una cena de esas con varios cubiertos por comensal (recordad, niños, los cubiertos se van cogiendo de fuera hacia dentro a medida que te sirven platos), con unos entrantes de jamón deconstruido, y un señor chuletón de segundo (ni deconstruido ni hostias).
Tras esto, a regar la cena al Cangrejo: un bar digamos... ambiguo (por no decir ultragay, dadas las canciones de Camilo Sesto y Rafaela Carrá que ponían y, sobre todo, el cuadro que había de una jovencita de pechos turgentes y exhuberantes con un pollón capaz de destrozar los anos más profundos). En fin, Barcelona, ya sabéis. Por último, a bailar techno-trance-mix al club Fellini en las Ramblas (en fín, siempre será mejor que el PUTOREGUETON).
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El viernes, una de cal y otra de arena: Una interesante charla sobre el futuro que espera a los investigadores españoles, y una aburrida charla sobre coordinación autonómica en materia de I+D. La charla de clausura me la fumé (para volver a oir a la gente hacerse la pelota...), cenita en el World Trade center y a salir hasta las 4 (tampoco mucho, que llevaba una media de 4 horas de sueño al día).
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El sábado de turisteo con Dani: Montjuïc, el Poble Español, la Plaza de España, el Raval, el Barri Gotic y el parque de la Ciudadela. Y el domingo de turisteo yo solito: Parc Güell, Barceloneta y la zona modernista del Passeig de Graçia...
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En definitiva: unas jornadas muy bien organizadas y muy interesantes tanto desde el punto de vista profesional como desde el punto de vista lúdico; aunque la verdad creo que me lo pasé mejor en las de Granada del año pasado, ¿será porque eran las primeras a las que asistía?
Así que a esperar a las próximas en Febrero de 2010. ¿Serán verdad los rumores y será en Tenerife, en pleno carnaval canario?
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Para más información: http://www.precarios.org/jornadas2009/es/
